La milanesa de cerdo es un platillo clásico que ha conquistado paladares alrededor del mundo por su sencillez y delicioso sabor. Utilizando chuleta de cerdo, esta receta se eleva a un nuevo nivel, demostrando la increíble versatilidad de este corte en la cocina.
La chuleta de cerdo es un corte excepcionalmente versátil, ideal para una amplia variedad de preparaciones. Ya sea frita, al horno, a la parrilla o salteada, su textura jugosa y su sabor profundo hacen que cada platillo sea una experiencia gastronómica memorable.
La milanesa de cerdo, empanizada y dorada a la perfección, es un ejemplo perfecto de cómo la chuleta de cerdo puede transformar una receta simple en un plato gourmet. La clave está en el marinado de la carne antes de empanizarla, lo que asegura que cada bocado esté lleno de sabor. El empanizado crujiente contrasta maravillosamente con la jugosidad de la chuleta, creando una combinación irresistible.
Además de ser increíblemente sabrosa, la chuleta de cerdo es una excelente fuente de proteínas, vitaminas del complejo B y minerales esenciales como el zinc y el hierro. Incorporar chuletas de cerdo en tus recetas no solo añade sabor, sino que también proporciona importantes nutrientes para una dieta balanceada.
Las milanesas de cerdo son extremadamente versátiles y se pueden acompañar con una variedad de guarniciones. Desde ensaladas frescas hasta papas al horno o un puré cremoso, las opciones son infinitas. Incluso puedes servirlas con salsas caseras para un toque extra de sabor.
El cerdo, y en particular las chuletas de cerdo, ofrecen una versatilidad inigualable en la cocina. Puedes experimentar con diferentes marinados, empanizados y métodos de cocción para descubrir nuevas formas de disfrutar de este delicioso corte. Ya sea en una receta tradicional como la milanesa de cerdo o en preparaciones más innovadoras, el cerdo siempre aporta un sabor y una textura que encantan a todos.
La milanesa de cerdo es solo una de las muchas maneras en que puedes disfrutar de la versatilidad de la chuleta de cerdo en la cocina. Su capacidad para adaptarse a diferentes sabores y métodos de cocción la convierte en una opción perfecta para cualquier ocasión. ¡Anímate a explorar nuevas recetas y sorprende a tus seres queridos con deliciosos platillos de cerdo!
Milanesa de cerdo en dos versiones
Equipos
- Tabla para picar
- Báscula
- Cuchillo
- Martillo para carnes
- Tazón
- Horno
- Bandeja para horno
Ingredientes
Para las milanesas de cerdo
- 4 porciones de Chuleta de cerdo
- 2 unidades de Huevos AA, batidos y con una pizca de sal
- ½ taza de Harina de trigo
- ½ taza de Miga de pan o panko
- 1½ litros de Aceite vegetal
- Sal marina al gusto
- Pimienta negra molida, al gusto
Versión 1: con queso mozzarella, tomate y orégano
- 8 unidades de Láminas de queso mozzarella
- 2 unidades de Tomate perita, pelado, cortado en rodajas y sazonado con sal
- Orégano al gusto
- Aceite de oliva aromatizado con albahaca para servir
Versión 2: con ensalada de regula, cebolla roja y palmitos frescos
- 1½ taza de Rúgula baby
- ½ taza de Palmitos frescos cortados en láminas finas
- ¼ taza de Cebolla roja cortada en plumas finas
- Tu vinagreta favorita al gusto
Instrucciones
Para las milanesas de cerdo
- Coloca las chuletas de cerdo en una bolsa plástica tipo Ziploc. Identifica el hueso de la chuleta y, con la ayuda de un martillo, aplasta únicamente la carne, dejando el hueso intacto.
- Sazona las milanesas con sal marina y pimienta negra molida al gusto.
- Prepara tres recipientes planos con los siguientes ingredientes, en este orden: harina de trigo, huevos batidos y pan rallado o panko.
- Apana o empaniza cada una de las milanesas de cerdo, pasando primero la carne por la harina de trigo, luego por el huevo batido y finalmente por el pan rallado o panko. Asegúrate de que cada pieza de carne quede bien empanizada. Reserva en refrigeración hasta el momento de freír.
- Para freír, calienta el aceite en una sartén grande a 180°C. Una vez alcanzada la temperatura, fríe cada milanesa hasta que el pan rallado esté dorado. Es importante revisar la fritura de cerca para lograr una textura perfecta y una cocción adecuada. Te recomiendo hacerlo en tandas pequeñas para evitar saturar el aceite y perder temperatura durante la cocción.
- Retira la milanesa del aceite y colócala en una bandeja con rejilla o sobre papel absorbente.
- Sirve las milanesas según tu preferencia: con queso mozzarella, tomate y orégano, o con una ensalada de rúgula, cebolla y palmitos.
Versión 1: con queso mozzarella, tomate y orégano
- Prende el horno en la función de gratinar.
- Una vez listas las milanesas, coloca sobre cada una dos láminas de queso mozzarella, algunas rodajas de tomate sazonado y orégano. Llévalas al horno a gratinar hasta que el queso se derrita.
- Sirve sazonando con un poco de aceite de albahaca para decorar y aromatizar el plato.
Versión 2: con ensalada de regula, cebolla roja y palmitos frescos
- En un tazón, mezcla la rúcula con la cebolla roja y los palmitos. Mantén la ensalada en un lugar fresco o en refrigeración hasta el momento de servir.
- Una vez listas las milanesas, coloca la ensalada sobre cada una de las porciones y sirve de inmediato. Deja en la mesa tu vinagreta favorita para que cada comensal sazone la ensalada al momento de comer.
Una forma diferente de hacer cerdo, gracias por las recetas chef.
Dos en unooo! Gracias chef por estas formas para hacer milanesa de cerdo
Probaré esta forma de hacer cerdo, muchas gracias chef! Me encantan tus recetas.