La técnica de rostizar no es simplemente asar; es un procedimiento en donde juegan un papel muy importante la temperatura y el tiempo, con esta técnica se busca potenciar los sabores naturales de los ingredientes. Al rostizar, los tomates liberan sus azúcares naturales, caramelizándose lentamente y creando una mezcla exquisita de dulzura y acidez.
Corta los tomates por la mitad y colócalos en una bandeja con rejilla, con el corte hacia arriba.
Sazona los tomates con 50 ml de aceite de oliva, sal marina y pimienta negra molida al gusto. Llévalos al horno durante 35-40 minutos, asegurándote de que la piel de los tomates se queme ligeramente. El tiempo de cocción puede variar según el horno que utilices, por lo que se recomienda revisarlos periódicamente.
Deja enfriar los tomates y guárdalos en refrigeración con un poco más de aceite de oliva y las especias de tu preferencia. Estos tomates te servirán como base para otras recetas o como acompañamiento de alguna carne.