Salsa de Pimienta
Las salsas desempeñan un papel fundamental en la cocina, no solo por su capacidad para potenciar el sabor, sino también por su impacto en la presentación y armonía del plato. Una salsa bien elaborada resalta las cualidades de las proteínas, aporta jugosidad a las preparaciones y equilibra los sabores, unificando los elementos del plato en una experiencia más completa y refinada
Tiempo de Prep 15 minutos min
Tiempo de Cocción 30 minutos min
Personas 4
Calorías 340 kcal
Sartén
Tabla para picar
Cuchillo
Colador
Báscula
- 200 gramos de cadera de res cortada en cubos
- 1 cucharada de pimienta negra n granos
- 30 mililitros de aceite de oliva
- 30 gramos de mantequilla sin sal
- 2 echalotes finamente picados
- ¼ taza de brandy
- 300 mililitros de caldo de carne
- 300 gramos de crema de leche
- Sal marina al gusto
Tritura la pimienta negra con un martillo de cocina, preferiblemente dentro de una bolsa tipo ziploc para evitar que se disperse. Marina los cubos de carne con sal y la pimienta triturada, asegurándote de que queden bien cubiertos.
En una sartén amplia, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto y sella la carne hasta que esté dorada por todos sus lados. Agrega la mantequilla junto con los echalotes y sofríe hasta que estén suaves y transparentes.
Incorpora el brandy y flambea con cuidado para evaporar el alcohol. Luego, añade el caldo de carne y la crema de leche. Cocina a fuego medio, sin tapa, hasta que la salsa se reduzca y espese, lo que tomará aproximadamente 15 minutos.
Una vez que la salsa haya alcanzado una consistencia cremosa, cuélala para eliminar los sólidos. Ajusta el sabor con sal y, si es necesario, un poco más de pimienta molida al gusto.
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