Abre los medallones de carne hasta que queden de un máximo de 1.5 cm de grosor. Una vez abiertos los filetes, sazónalos con sal marina y pimienta negra al gusto.
Pica finamente la cebolla larga y la cebolla cabezona. Una vez picadas, agrégalas en un caldero que esté frío.
Pela y pica finamente los tomates.
En un fogón a fuego medio, coloca el caldero con la mezcla de cebollas y añade 30 ml de aceite vegetal. Cocina hasta que las cebollas comiencen a sudar. Una vez las cebollas estén sudadas, incorpora el ajo finamente picado. A continuación, agrega la cúrcuma y el comino, revolviendo bien todos los ingredientes.
Incorpora los tomates y ajusta el sabor con sal marina y pimienta negra molida al gusto. Cocina a fuego bajo con el caldero tapado hasta obtener una salsa criolla jugosa.
Asa la carne en una parrilla o plancha bien caliente hasta alcanzar el punto de cocción deseado.
Fríe un huevo en una cacerola, procurando que la yema quede blanda.
Para servir, coloca el solomillo sobre el plato, cúbrelo con la salsa y corona con el huevo. Puedes acompañarlo con arroz blanco o plátano maduro frito.